El Sol y el Viento: Reflexión



El sol y el viento discutían para ver quién era el más fuerte.
El viento bravucón decía:
-¿Ves aquel anciano envuelto en una capa? Te apuesto a que le quitaré la capa más rápido que tú.


El sol se ocultó tras una nube y el viento comenzó a soplar cada vez con más fuerza, hasta convertirse casi en un huracán, pero cuanto más soplaba, con más fuerza se agarraba el anciano a su capa.

Por fin el viento se calmó y se dio por vencido.

Entonces el sol que permanecía detrás de la nube, se asomó con una cálida sonrisa reconfortando al anciano, y no pasó mucho tiempo hasta que el anciano acalorado por la continua caricia del sol se quitó la capa.

El sol demostró así al viento, que la suavidad y la ternura del amor de los abrazos son más poderosos que la furia y la fuerza.

L. TOLSTOI